Cómo fiscaliza el SAT los depósitos en efectivo.
La autoridad fiscal considera como depósitos en efectivo todos aquellos realizados en moneda nacional o extranjera hechos en alguna cuenta del sistema financiero, así como las adquisiciones en efectivo de cheques de caja.
Por el otro lado, no son depósitos en efectivo los hechos a favor de contribuyentes mediante transferencias electrónicas, traspasos de cuenta, títulos de crédito o cualquier otro documentos o sistema pactado con alguna institución del sistema financiero.
Así vigila el fisco los depósitos en efectivo:
Uno de los temas en torno a los cuales probablemente hay más rumores es el de la fiscalización de los depósitos en efectivo.
Hay quienes piensan que por los depósitos en efectivo no se deben de pagar impuestos. No es así. Otra cosa, muy distinta, es que muchas personas, por lo general pertenecientes a la economía informal, no estén registradas ante el registro federal de contribuyentes (RFC) y hagan mucho uso del dinero en efectivo, lo que dificulta a la autoridad fiscal la fiscalización de este tipo de cuentas. Sin embargo, la obligación de pagar impuestos igual existe y la posibilidad de que la autoridad requiera el pago de impuestos es altamente probable.
De acuerdo a la Ley del Ingreso Sobre la Renta (LISR), se debe pagar ISR por los ingresos que los residentes de México tengan, con independencia del origen de éstos, así como por los ingresos de los extranjeros originados en el país.
En general, la autoridad fiscal considera como ingresos todo aquello que incremente el patrimonio de los contribuyentes, con algunas excepciones estipuladas en la ley.
Ingresos libres de impuestos
La ley contempla algunos ingresos por los que no se tiene que pagar ISR, como las prestaciones de seguridad social, los provenientes de cajas de ahorro, los viáticos y los donativos que el contribuyente reciba de su cónyuge, padres o hijos, entre otros. Sin embargo, no se paga ISR por este tipo de ingresos porque la excepción está expresada explícitamente en la ley, y no por su carácter como ingresos en efectivo.
De hecho, este tipo de ingresos tienen que cumplir con ciertas obligaciones fiscales para no ser considerados gravables, como haber sido usados en servicio de un patrón, en el caso de los viáticos.
En el caso de los préstamos entre familiares, si bien no se consideran ingresos acumulables, y por lo tanto no se paga impuestos por ellos, se tienen que reportar ante el fisco cuando exceden los 600 mil pesos en un año.
¿Qué reportan los bancos al SAT?
Otra confusión común consiste en pensar que los depósitos bancarios de menos de 15 mil pesos en efectivo están exentos de impuestos. Tampoco es verdad.
Se suele pensar esto porque según el artículo 55 de la LISR, los bancos están obligados a informar cuando los depósitos en efectivo acumulados en un mes superen los 15 mil pesos. Es decir, si los depósitos son de menos que esto, el banco no está obligado a informarle al SAT. Sin embargo, el hecho de que el fisco nunca se entere de esto y, por ende, no proceda a fiscalizar al contribuyente que tuvo estos ingresos, no significa que no esté obligado a pagar impuestos por ellos.